5 ladrones de energía que afectan tu rendimiento

La experiencia de sentirse sin energía, no es ajena para la mayoría de las personas. En ocasiones son simplemente las secuelas de una actividad física o mental extrema, pero también pueden ser obra de los ladrones de energía.

Este término hace referencia a situaciones y personas que absorben la carga energética del individuo, dejándolo sin fuerzas y con una creciente sensación de desánimo y extenuación, que parece incrementarse día a día.

Lo peor de todo, es que en lugar de hacerlos a un lado, los mantenemos porque no tenemos conciencia de todo el mal que nos están causando.

¿Cómo puedes saber si te están robando la energía?

El cansancio injustificado

Esta puede resultar una causa muy evidente, pero puedes pasarla por alto. ¿Estás durmiendo lo suficiente y aun así sientes como si hubieses corrido un maratón y no logras explicar tu cansancio?

No logras descansar porque no te desconectas lo suficiente, vas a la cama pensando en tus pendientes, en lo que tendrás que hacer el día de mañana, etc. tanto, que despiertas a media noche sin una aparente razón.

El malhumor

La mayor parte del día resultas de mal humor sin motivo aparente, tus estados de ánimo son volubles al trabajar o entablar una conversación.

Afecta el mínimo detalle como un tono de voz, las risas, los ruidos, etc. Es imposible ver lo positivo de las cosas, que cada situación te hace pensar como si fuese una catástrofe.

Baja autoestima

Este es el detalle más difícil de sobrellevar, con base en esto surgen muchos hilos negativos de tu vida diaria.

Comienzas a juzgar tus acciones, criticar todo lo que haces, justificar los errores de otras personas, creándote en la conciencia de que tú eres el único responsable de dichos errores, pierdes la confianza en ti, la fuerza de voluntad y tu valor como persona.

Impotencia

La frustración te invade hasta el punto de creer que no eres capás de lograr lo que te propones, dejas pendientes tus metas y posiblemente no las inicias nunca.

Tan fuerte es el poder de la mente, que te convences y comienzas a fallar en tus intentos o te resulta demasiado complicado.

Pero, como saber en qué momento llegas a este punto, ¿Cuál fue la razón para afectar en todas estas áreas de rendimiento personal? A continuación te lo explicamos.

Conoce los principales ladrones de energía

Conocerás los 5 ladrones de energía, que pueden causar verdaderos estragos en tu vida (si se lo permites).

Descúbrelos y lucha contra ellos y el agotamiento que producen.

1. Personas tóxicas

Son los ladrones de energía por excelencia, las personas tóxicas son aquellos individuos que únicamente se acercan a ti para compartir emociones y pensamientos negativos hacia ti o terceras personas (miedos, rencores, calumnias, envidia, tragedias, y prejuicios).

No quiere decir esto que no apoyes a tus amigos o familiares, en un momento de dificultad, pero hay una diferencia entre algo temporal y un patrón de conducta.

Generalmente, puedes identificar a las personas tóxicas para tu energía, porque al terminar de hablarles te sientes agotado y sin fuerzas.

Marca distancia con estos individuos, y acércate a aquellos que aporten ideas positivas y motivación en su vida. Puedes sostener el espacio energético de una persona, escuchando sin participar en el espiral de negatividad.

Si has notado, que puedes ser tú una persona tóxica, es momento de analizar tus prioridades, romper viejos programas, hacer actividades nuevas y replantear tus objetivos, con mejor disposición.

2. Desorden

Nada absorbe más energía que un lugar desordenado, o lleno de objetos acumulados que ya no utilizas. Organiza tus espacios, y regala aquello que no uses, y que se encuentre en buenas condiciones.

Sincérate contigo mismo y deshazte de trasto viejo que sabes que no volverás a emplear. Recuerda que lo que está afuera, es un reflejo del interior.

3. Rencor

Uno de los más terribles ladrones de energía, el rencor drena el alma y absorbe tu energía, además de hacerte desperdiciar tiempo y esfuerzo en pensamientos inútiles, y generalmente cargados de gran negatividad.

Por el contrario, practicar el perdón te recarga, conectando con la Fuente Divina de Amor y Compasión. El perdón es una decisión liberadora y un camino que te pertenece, nadie puede elegirlo por ti.

Esto no quiere decir que permitas la entrada a personas que te hicieron daño, y sabes que tienen la intención de continuar haciéndolo.

Rompe el ciclo y el poder que tienen sobre ti, reconociendo el aprendizaje que te brindó la experiencia y perdonando, por tu propio bienestar.

4. No adaptarse a los cambios

Cuando no aprendes a fluir con las altas y bajas de tu vida, asumes una posición de resistencia. Ten presente que los cambios continuarán suscitándose, y mientras más te aferres, más energía necesitarás para no moverte.

Haz uso de tu creatividad, y permítete ser flexible. Esto también aplica para aquellas tareas que te desagradan, pero tienes el deber de hacerlo. Es preferible no comprometerse o delegar la función.

En caso de que sea ineludible, asúmelo con tu mejor estado de ánimo, tienes la habilidad para superarlo y aprender algo nuevo en el camino.

5. Deudas pendientes

Las finanzas son un tema de preocupación constante, y, por lo tanto, uno de los ladrones de energía más difíciles de eludir. Sé responsable con tus recursos y paga tus deudas a tiempo, eso te brindará la tranquilidad que necesitas.

Como recomendación, puedes llevar una agenda con tus gatos y deudas pendientes. Anticipa y administra todas las entradas y salidas de dinero, así podrás ver más claro tu disponible y tener la posibilidad de eliminar gatos hormigas. Verás que administrando de esta forma podrás mejorar un poco tu economía. 

¿Cómo recuperamos la motivación y cambiamos?

• Relaciónate con otras personas y atrévete a ampliar tu círculo de amistades.
•  Llénate de energía practicando hábitos saludables que mejoren tu calidad de vida.
•  Divide las grandes tareas en pequeñas tareas; a veces es más fácil dar pequeños pasos y conseguir logros que te inspiren y motiven para seguir adelante.
• Hazte promesas y adquiere compromisos, no te falles a ti mismo y no rompas las promesas o propósitos que te planteas.
• Busca una actividad que te mantenga activo o buena compañía, alguien para hablar de vez en cuando, en persona o por mensaje de texto. La idea es no tener el sentimiento de cansancio, abandono y desmotivación.
• Practica afirmaciones positivas o lee frases motivadoras. Empezar tus mañana o cerrar el día con afirmaciones positivas es otra manera de cambiar tu mentalidad y sentirte más animado.

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